(SIC), un proyecto de Joan Morera para Zona "C".
Hace ya casi 20 años grabé en una cinta de casete a mi abuela para que me contase su infancia: su periplo por Galicia y España, su guerra y su posguerra. Ahora vuelvo a recorrer con este trabajo su historia a través de sus fotografías realizadas cuando ya estaba jubilada y podía viajar, pasear... Revisándolas una y otra vez pude percibir como de mayor volvió a los lugares que de alguna manera marcaron su infancia y el resto de su vida, los mismos lugares de los que me habló una noche en mi aldea...
Joan Morera
(sic) es un adverbio que proviene de la frase latina sic erat scriptum, ‘así fue escrito’. Se utiliza en los textos para indicar que la frase que se transcribe es literal, aunque pueda parecer, o sea, técnicamente incorrecta. Joan Morera ha tomado estas siglas como título de un proyecto fotográfico que forma parte de su investigación doctoral, y que se articula en varias series interconectadas entre si, aunque todas participan de unos lugares comunes como el estudio del paisaje, la fotografía familiar, la memoria, el relato, y la investigación del propio medio fotográfico.
(sic) activa el archivo fotográfico de su abuela Fefu, quien una vez jubilada recorre como turista aquellos lugares en los que vivió como exiliada durante la Guerra Civil. Morera encontró cientos de fotografías en los que la composición — un hierático posado delante del monumento— se repite una y otra vez. No importa si el lugar es Francia o las cataratas del Iguazú, tampoco importa si la calidad de las instantáneas no es la óptima. El “selfie” se repite como retrato y como conquista del espacio simbólico en el momento Kodak, donde la fotografía se democratiza y es accesible a casi cualquier bolsillo.
En el archivo de Fefu confluyen conceptos como monumento (un homenaje a la memoria), paisaje (ocupación y construcción de lugares), autorrepresentación (hoy casi podríamos decir “selfies”), archivo (conservación de instantáneas), turismo (lugares catalogados como patrimonio) y valor documental (ya que este proyecto rinde un homenaje no sólo a Josefa, sino a la memoria doméstica de varias generaciones).
Para ello Morera ha ideado una instalación en la que conviven las 106 instantáneas del archivo personal de Fefu Fernández-Vega con una entrevista original de 1996 en la que Joan, de niño, graba una inocente conversación en la que le pregunta a su abuela por su vida durante la Guerra Civil, el exilio y los lugares donde vivió. La entrevista es ilustrada con una fotografía de gran formato en la que se ve a Joan, también de niño, leyendo (lo que nos habla de la importancia de “leer” la imagen); la transcripción de la entrevista impresa al revés, lo que hace necesario un espejo para poder leerla correctamente y tres fotografías de formato mediano con la imagen de la casa donde Fefa le contó la historia al pequeño Joan, otra foto de Fefa en la que rompe la pose hierática para retratarse bailando y una tercera, una foto de grupo, otro clásico de la fotografía amateur. Además se editará un libro que funcionará como pieza artística.